El contertulio y moderador del acto, D. Francisco Martín Piosa, fue el encargado de presentar a los invitados, que nada mas empezar sedió la palabra a Rafael Díaz (padre) que quiso expresar, con el apoyo de su hijo y de Juan Borrero, su deseo de que se vuelva a retomar el tema de la creación del monumento al costalero, por el merecimiento a su labor dentro del mundo de las cofradía ya que según Rafael Díaz "sin ellos no existiría la Semana Santa".
Rafael Díaz y su hijo, que toca el martillo en los Javieres y el Barratillo entre otras hermandades, nos hablaron de sus viviencias como capataces y de la actualidad del mundo del costal, contándonos con las trabas que se encuentran últimamente los capataces, por parte de las juntas de gobierno de las hermandades para poder contar con sus costaleros debido, a los estrictos requisitos que se exigen para poder sacar un paso. Juan Borrero, capataz durante muchos años de la Esperanza de Triana, y con la simpatía que le caracteriza, nos llevó con sus recuerdos a sus primeros años como capataz, recordándonos que fue uno de los primeros en exigir un seguro para los costaleros. Tanto Rafael Díaz Palacios como Juan A. Borrero coincidian en que, desde su retiro, siguen echando de menos el martillo.
En el encuentro con estos grandes maestros, el público participó activamente preguntando acerca de sus dudas sobre los capataces y costaleros y sobre los sentimientos que esperimentan estos, cuando estan delante de un paso.
Al finalizar el acto nuestro contertulio Emilio González entregó un llamador a D. Juan A. Borrero.
El contertulio Juan Manuel Flores Castillo entregó otro llamador a D. Rafael Díaz Palacios.
Y por último el contertulio Marcos de la Virgen Ortega entregó otro llamador a D. Rafael Díaz Talaverón.
Después de la entrega de obsequios nos dispusimos a continuar la velada con una convivencia en la que participaron nuestros invitados junto con todos los presentes.
Por último agradecer a estos tres grandes maestros del martillo su visita a nuestra Tertulia, recuerdo que guardaremos con mucho cariño.
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